Cada 28 de julio peruanos alrededor del mundo celebran las Fiestas Patrias en conmemoración a la declaratoria de Independencia en 1821 por parte del libertador José de San Martín. Como parte de esas fiestas, se organizan una serie de celebraciones y actos que incluyen el uso de banderas y escarapelas, la Gran Parada Cívico-Militar, la misa Te Deum en la Catedral de Lima, el tradicional discurso presidencial y celebraciones más informales como viajes dentro del país. Por supuesto, el ceviche, el pisco sour y la buena mesa también acompañan los festejos.
Biografía
Nacida en el siglo como Isabel Flores de Oliva, fue hija de Gaspar Flores, arcabucero natural de San Germán, Puerto Rico. Así lo asegura la placa en la casa de los Flores, la cual aún se conserva. En 1545, Gaspar salió de España, después de pasar por Puerto Rico y Panamá, que formaban parte del virreinato de Nueva España, llegó al Perú en 1547, como soldado del Pacificador Pedro de la Gasca, quien restableció la Real Audiencia en 1549, recuperando el dominio de la Corona tras la usurpación del poder por Gonzalo Pizarro, gobernante del Perú entre 1544-1548. Gaspar Flores fue nombrado arcabucero el 9 de marzo de 1557, por don Andrés Hurtado de Mendoza, tercer Virrey del Perú entre 1556-1561. El 1 de mayo de 1577, se casó, en Lima, con la criolla limeña María de Oliva y Herrera, apellidos procedentes de Aragón. Ese mismo año servía de arcabucero en la guarda del V Virrey Francisco de Toledo (1569-1581). Existen dos versiones de la fecha de su nacimiento, el 20 o el 30 de abril de 1586. En los registros del Proceso Ordinario se encuentra que la madre y otras personas declaran que nació el día postrero del mes de abril (30) a las 4 de la tarde. El primero de los biógrafos de Rosa, Fray Pedro de Loaiza (su confesor también) y por sus padres como consta en el Proceso Ordinario, interrogatorio que realizaron las autoridades religiosas sobre la vida de Rosa. Isabel o Rosa fue la cuarta hija de los Flores Oliva, fue bautizada, según partida, el 25 de mayo de 1586, en la Parroquia de San Sebastián, en Lima por el sacerdote Antonio Polanco, siendo sus padrinos Hernando de Baldés y María Osorio.
ORACIÓN A SANTA ROSA DE LIMA
Santa Rosa, "Rosa y Reina del Perú", encendida en el amor a Dios y a la fe, te apartaste del mundo y te entregaste a Cristo en medio de admirables penitencias.Quisiste ser apóstol y llevar a todos los hombres hacia Jesús. Para ello renunciaste a tu hermosura y a tus atractivos humanos, mortificando tu cuerpo... Alcánzanos el camino de la verdadera vida para que lleguemos a gozar un día de los bienes eternos. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
ORACIÓN
Oh esclarecida Virgen, Rosa celestial, que con el buen olor de vuestras virtudes habéis llenado de fragancia a toda la Iglesia de Dios y merecido en la gloria una corona inmarcesible; a vuestra protección acudimos para que nos alcances de vuestro celestial Esposo un corazón desprendido de las vanidades del mundo y lleno de amor divino.¡Oh flor la más hermosa y delicada que ha producido la tierra americana!, portento de la gracia y modelo de las almas que desean seguir de cerca las huellas del Divino Maestro, obtened para nosotros las bendiciones del Señor. Proteged a la Iglesia, sostened a las almas buenas y apartad del pueblo cristiano las tinieblas de los errores para que brille siempre majestuosa la luz de la Fe y para que Jesús, vida nuestra, reine en las inteligencias de todos los hombres y nos admita algún día en su eterna y dichosa mansión. Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario